
Empieza el Adviento: lo comenzamos de la mejor manera, en compañía de María.
Les presentamos una hermosa oración de la Hna María Dolores, misionera de la Consolata:
María, mujer sencilla y disponible
Gloria, honor y alabanza a la Santa Trinidad, por darnos a María, mujer sencilla y disponible.
Gracias Madre mía por acoger el Misterio de la Encarnación.
No entiendes, te zambulles en la fe y lo mismo te haces disponible.
Nada sencillo engendrar y cuidar a un niño recién nacido en esa situación,
donde no hay lugar para Él en ningún corazón.
¿Cómo puede ser, la mayor riqueza en tanta pobreza? ¿Además ya perseguido?
A si es nuestro Dios, para levantar al caído se hace un niño y vive escondido.
Espera que lo busquemos, lo tomemos en brazos y le brindemos cariño, nos acerquemos con confianza, lo acariciemos, lo colmemos de besos.
Al ver nuestra cercanía, nos mira con ternura y con un gesto de alegría nos sonríe.
Gracias a María y a mi Dios por tanta disponibilidad, todo lo hacen por mi y por la humanidad.