Ya hemos presentado la linda experiencia de la misión juvenil en Corrientes (mira aquí). Hoy compartimos los testimonios de los participantes, junto con fotos hermosas.
La Familia Consolata este año se “Atrevió a ser Santo” en Concepción del Yaguareté Corá, provincia de Corrientes, la cual nos recibió con fuertes lluvias y una cálida acogida que permitió que cincuenta jóvenes se sumarán a la invitación.
La misión se realizó del 7 al 18 de enero del 2019, con jóvenes que provenían de diversas provincias, Jujuy, Salta, Formosa, Buenos Aires, Mendoza y Corrientes. Durante estos días los Jóvenes desafiaron las inclemencias del tiempo y salieron al encuentro de las familias, en donde se compartió la vida y se la puso en manos de Dios. Por los tarde niños, jóvenes y adultos, se acercaban a disfrutar de las actividades propuestas por los misioneros.
“La misión para mi tuvo un significado muy valioso, primero porque la familia Consolata siempre estuvieron muy atentos de todos los chicos, especialmente en las personas que necesitaban desahogarse. Ellos siempre estuvieron escuchando cada historia y dando consejos.
Fue mi primera misión y sé que estaba un poco tímido, pero ya se para la próxima. Los momentos de formación y oración fueron tiempos valiosos. Creo que la misión hizo cambiar a muchas personas y en lo personal, yo también cambie. Les doy muchas gracias por todo y suerte en todo” Miguel, Joven participante
El equipo animador estuvo conformado por: P. Danilo, P. Owino, Hna Hannah, Hna Emma, los laicos: Gonzalo Meza, Mónica Cabezas, Gabriela Alaniz y Miriam Mendoza, los Seminaristas: John Paul y Donald, y las Pre novicias: Nadia y Muriel.
“La misión fue sentirme amada y elegida por Dios, un tiempo de encuentro personal y encuentro con mis hermanos. Fue hacerme instrumento útil en las manos del padre para compartir mis dones con los demás” Mónica Cabezas, LMC
En nombre de la Familia Consolata damos gracias a todos quienes nos acompañaron con sus oraciones y su cercanía. La misión fue vivida con gozo y entusiasmo misionero. Ponemos en sus oraciones los frutos de la misión, para que los jóvenes puedan permanecer en Cristo.
Nadia y Muriel, prenovicias